Impacto 2022

Alfonso Quiñónez Pineda
Presidente

El 2022 fue un año importante en el que continuamos por el rumbo correcto para honrar el legado de quienes nos precedieron. Reafirmamos nuestra estrategia de Impacto Colectivo y luego de un largo período post pandemia, retomamos el trabajo de manera presencial con nuestros aliados y el contacto directo con los beneficiarios de nuestros proyectos, que representan la razón de ser de la Fundación.

Promovimos acciones encaminadas a garantizar derechos fundamentales como el acceso a salud de primer nivel, la educación integral, un entorno comunitario digno, el apoyo a la niñez y adolescencia y también hemos sido pioneros en la creación y desarrollo de herramientas que nos permitirán articular el trabajo con todas las organizaciones del rubro social.

En este informe, que refleja el impacto de la FRMA durante el 2022, compartimos los diferentes logros, que movilizaron soluciones, en nuestros 3 ejes estratégicos.

Es así que durante un año de trabajo continuo impactamos la vida de más de 79,000 personas de manera directa y más de 600,000 de manera indirecta. Con una inversión social de más de $2 millones, ejecutamos 4 proyectos de Alto Impacto, 3 iniciativas, 2 proyectos de Familia, 3 de legado, 1 Proyecto Especial, desarrollamos la nueva Plataforma colaborativa para el sector social PONGO y articulamos acciones con 90 aliados.

En nuestro eje de Alto Impacto nos enfocamos en la ejecución de grandes proyectos que nos trajeron grandes resultados. En Alto Impacto Escalón, trabajamos en el fortalecimiento de los programas que favorecen el desarrollo de las familias de las comunidades de la Colonia Escalón, impactando, con nuestro modelo integral, la vida de más de 346 personas de manera directa y promoviendo acciones para la inserción laboral y el desarrollo integral, a través de nuestro programa de becas.

En Alto Impacto Soyapango, cumplimos el primer año de ejecución exitosa y junto a la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), y 15 aliados, ejecutamos cuatro componentes: Impacto Colectivo, Crecimiento Económico, Desarrollo Juvenil y Primera Infancia, beneficiando a más de 7,000 personas de manera directa e indirecta.

El mes de agosto nos trajo la satisfacción de colocar la primera piedra del Proyecto “Renovación de Emergencias Pediátricas del Hospital San Juan de Dios de Santa Ana”, en alianza con el Ministerio de Salud y aliados donantes, impactando a más de 16,000 pacientes pediátricos y 33,000 adultos anualmente, que reciben atención médica en el área de emergencias de este hospital. Este Proyecto representa uno de los legados de filantropía de nuestros fundadores y este año nos llenó de satisfacción contar con el acompañamiento y el apoyo de miembros donantes de la familia, quienes se sumaron a ser parte de la solución.

En nuestro eje de Familia y Legado trabajamos de la mano con instituciones aliadas, fortaleciéndoles para la ejecución de 8 proyectos – 2 de familia y 6 de legado- , con una inversión social de más de $180,000 dólares, y más de 11,000 vidas impactadas.

En Formación Social fortalecimos a profesionales del rubro, facilitando las oportunidades de formación para el sector, a través de talleres, conferencias y el Diplomado de Alto Nivel “Management Lab para el Impacto Social”. También, el 2022 nos permitió crear y lanzar la versión Beta de la Plataforma PONGO, la primera plataforma digital colaborativa enfocada en acercar conocimientos y oportunidades e inspirar la colaboración y el desarrollo de capacidades para profesionales del rubro social.

Como parte importante de las acciones 2022, y en el marco de nuestro 50 aniversario, presentamos el Libro “Con voluntad Hay Camino, Historia de nuestro Legado Filantrópico” con el que honramos el espíritu de filantropía de la Familia Meza Ayau. También realizamos el lanzamiento de los podcast “Con Voluntad hay Camino”, y el podcast del libro infantil “El Tren de Tío Lito”.

Es así que este 2022 lo cerramos con una Fundación fortalecida institucionalmente, en la que crecimos, no solo en número de personas que integran el equipo, sino también en calidad, impacto, pero sobre todo en el sueño de trabajar para mejorar la calidad de vida de los Salvadoreños.

Cierro este mensaje, honrando con mucho agradecimiento a quienes, sin saberlo, nos mostraron el significado del verdadero Impacto Colectivo: Nuestros queridos Tata, Tío Lito, Mamá Angelita, y miembros de las diferentes Juntas Directivas de la Fundación.

A todos mi admiración y agradecimiento. Ahora nos toca a nosotros ver hacia el futuro y pensar ¿a dónde queremos estar el próximo año? Seguramente alineándonos con las enormes oportunidades que nos presenta la realidad actual y los retos que nos hacen seguir cada día más comprometidos para construir juntos las grandes soluciones a los problemas de los salvadoreños.

Gracias por un 2022 muy valioso para nuestra Fundación, lleno de aprendizajes, metas cumplidas y sobre todo con la firme convicción de ser siempre parte de la solución.

FRMA 2024